No, la constelaciones familiares muestran un impulso para tu vida. Te ayudan a ver la posición que ocupas ante las situaciones conflictivas de tu sistema familiar. La persona que ha sido tu representante es probable que presente en su propia vida algunas dinámicas similares a las tuyas y por eso ha salido como tu representante. Recuerda que todos los que son representantes dentro de una Constelación están tanto al servicio de un trabajo para otro, como para la sanación de sus propios procesos. Incluso las personas que están de observadoras están sanando a través del movimiento que se realiza. 

Pero una vez finalizada la Constelación Familiar, cada quien toma lo suyo y deja en “El campo de conocimiento” aquello que no es suyo.

No, simplemente te ayuda a ver la percepción que tienes de tu sistema familiar y el lugar dónde te posicionas para que puedas ser consciente de los “Órdenes del Amor” que estás transgrediendo, de esta manera es posible que reunas las fuerzas para emprender nuevas acciones en tu vida.

No, pero puedes ver las implicaciones familiares y su respectivo posicionamiento en cuanto a toda la familia. Puedes descubrir el origen de las situaciones conflictivas, y  en consecuencia establecer una vinculación más sana y amorosa con ellos. Además, puedes ver las cargas que están llevando por “lealtad o amor ciego”. Te ayuda a que ocupes tu lugar ante ellos y asumas tus propias responsabilidades. 

Todo trabajo que realices en ti, tus hijos se verán beneficiados.

Toda enfermedad tiene un gran componente emocional y transgeneracional, por lo tanto te puede ayudar a tener una visión mucho más amplia de tus síntomas y enfermedades, recuerda que más que heredar las enfermedades, heredamos maneras de ver la vida, hábitos y costumbres que terminan afectando nuestra salud. Desde ese punto de vista te pueden ayudar a ser consciente de lo que te está afectando y de posibles acciones a emprender. Pero, jamás una Constelación Familiar puede sustituir un tratamiento médico.

Sí, una Constelación Familiar te brinda una visión amplia de los procesos de vida y muerte, porque te brinda serenidad, aceptación y humildad ante algo más grande que nuestra existencia. Te pueden ayudar a exteriorizar sentimientos no digeridos o expresados ante un duelo, por lo tanto te ayudan a la elaboración y cierre de los mismos. 

Lo que se ve a través de las Constelaciones Familiares son movimientos de nuestro SER y estos suelen ser movimientos lentos y profundos. En un principio se gana energía y vitalidad, luego suele sobrevenir tristeza y pesar (Crisis de sanación) y más adelante se reunirá la fuerza necesaria para emprender acciones o realizar movimientos internos en una dirección determinada (esto suele suceder cuando prácticamente he olvidado la constelación). 

Cuando se realiza una Constelación Familiar se suelen tener grandes expectativas, las mismas suelen entorpecer el proceso de sanación. Jamás debemos colocar tanto peso a una constelación, lo más recomendable es estar atento a los movimientos internos de nuestra reflexión sosegada y éstos se dan a través del reposo y la calma interna. 

Es recomendable no realizar acciones drásticas luego de una constelación porque suelen mostrar una resistencia interna a la verdadera sanación. Tampoco es recomendable hablar con nadie de la misma buscando entender. Es mejor esperar un tiempo en observación y respeto interno, luego poco a poco surgirá en tu corazón un impulso que empezará a dirigir tus acciones, pero el mismo es sereno y te brinda paz y fortaleza.

*Si quieres profundizar en el tema puedes realizar con nosotros una Constelación Familiar Online o bien entrenarte con nuestra Formación Online en Constelaciones Familiares.

Escrito por Luz Rodríguez

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